Diariamente, nos adentramos en búsquedas en Internet que damos por válidas, sin comprobar su veracidad, ni comprobar si se trata de una fuente fiable. Esto juega en nuestra contra, ya que no toda la información es acertada. Además nunca debemos olvidar que la información no es conocimiento.
En ocasiones creemos que sabemos cuando en realidad solo tenemos una determinada información, y no sabemos que hacer con ella.
Imagen
A pesar de las ventajas del uso de las TIC, debemos tener cuidado. La infoxicación nos puede provocar estrés, ansiedad y dependencia. Además, también puede cusar fatiga, ya que tras 90 minutos de atención sostenida en la búsqueda, se pasa a la fatiga (Barriga, 2014).
Ahora bien, ¿cómo combatir la infoxicación? ¿qué hacer para eliminar nos efectos negativos?
Jonhson, es su libro The Information Diet (2011), propone:
- Acercarse a la fuente de la cual se extrae la información.
- Leer menos pero de mayor calidad.
- Priorizar ciertos medios de los cuales se extrae la información.
- Controlar el tiempo ante la pantalla.
Como vemos todo en exceso nos perjudica. Es necesario un buen uso de las herramientas, independientemente de cuales sean estas.